Schloss Greinburg
Auf dem Hügel Hohenstein in Grein steht eines der ältesten Wohnschlösser Österreichs, das im Renaissance-Stil errichtete Schloss Greinburg. Es wurde 1488 von den Brüdern Heinrich und Sigmund Prüschenk erbaut. Nach der Fertigstellung nannte man den Bau Heinrichsburg. Erst im Jahre 1533 erhielt das Schloss den heutigen Namen Greinburg. Plünderungen und Besetzungen blieben dem Schloss nicht erspart, wobei der hauseigene Hexenkeller noch heute für schaurige Überraschungen sorgt. Seit 1823 sind das Schloss und seine Forste im Besitz der Herzöge von Sachsen Coburg-Gotha.
Doch die Greinburg hat nicht nur eine interessante Geschichte zu bieten, vor allem der schöne Renaissancehof (mit Konzerten im Sommer), das steinerne Theater und das ebenfalls hier untergebrachte Schifffahrtsmuseum sind einen Besuch wert. Hier kann man Modelle von Schiffen bestaunen, die früher auf der Donau, der Enns und der Traun unterwegs waren. Ebenso ist es möglich, sich in das gefährliche und aufregende Leben der Schiffslotsen zurückzuversetzen, die vor allem mit den Stromhindernissen rund um Grein zu kämpfen hatten.
El castillo Greinburg
El castillo Greinburg que está sobre la colina Hohenstein en Grein es uno de los castillos habitados más antiguos de Austria. Fue construido en 1488 por los hermanos Heinrich y Sigmund Prüschenk en estilo del Renacimiento. Al finalizar la construcción se lo llamó Heinrichsburg y recién en el año 1533 recibió su nombre actual „Greinburg“. El castillo tuvo que enfrentarse también a robos y ocupaciones, de cualquier manera aún hoy en día el llamado sótano de las brujas que se encuentra en el castillo da siempre de que hablar por sus historias macabras. El castillo y los bosques a su alrededor se encuentran en posesión de los duques de Sajonia Coburg-Gotha desde 1823.
El castillo Greinburg no sólo tiene una historia interesante, sino que también posee un patio de la época del Renacimiento (donde hay conciertos en verano), el teatro de piedra y el museo de navegación, los cuales valen la pena visitar. Aquí se pueden contemplar maquetas de buques que circulaban antes en el Danubio, el Enns y el Traun. Así como también es posible recordar la vida peligrosa y excitante de los practicantes de buque, sobre todo los que tenían problemas con los rápidos alrededor de Grein.
El Castillo de Manzanares el Real – un castillo de ensueño
Manzanares el Real es un municipio perteneciente a la Comunidad de Madrid.
Está situado en la cabecera del Río Manzanares, junto al embalse de Santillana,
a 53 km de Madrid. El nombre del pueblo y del río se deben a la gran cantidad de
manzanos silvestres (maíllos o maguillos, con frutos pequeños y poco sabrosos)
que existían en el valle sepultado ahora por el embalse de Santillana.
Manzanares el Real es una privilegiada población por estar situada en uno de los
parajes serranos más representativos del Guadarrama. Con razón, es considerado
uno de los mejores pueblos serranos de la Comunidad de Madrid. Manzanares el
Real es un lugar de veraneo muy apreciado por los madrileños y punto de partida
de las excursiones hacia el macizo de La Pedriza.
El Castillo de
Manzanares el Real es el mejor conservado de la Comunidad de Madrid y se
construyó en el siglo XV.
La
fortaleza fue levantada sobre una antigua ermita románico-mudéjar a finales del
siglo XV que aún se conserva adosada al este del edificio en estado
ruinoso, sin techumbre. Actualmente pueden observarse aún las tres naves que
componían su planta.
El castillo fue reconstruido en 1914 por Lampérez y en 1977 por Valcarcer. Por
tanto, el castillo actual es una restauración del segundo castillo de la familia
Mendoza.
Del castillo original se conservan el exterior y parte de los elementos estructurales del interior, el resto ha sido restaurado por la Comunidad de Madrid.
El segundo castillo se erigió como recinto militar aunque pronto se
convirtió en residencia familiar de los Mendoza. Se trata de un singular
edificio castillo-palacio del último gótico, diferente al resto de castillos.
Aunque tiene un aspecto general de fortaleza, es un castillo más noble y culto
que fiero y hosco, la residencia ideal del caballero renacentista, mitad poeta y
mitad soldado. El castillo es de doble recinto, pudiéndose recorrer el camino
entre el palacio y las murallas, y el adarve, sobre éstas. La parte residencial
se organizó alrededor de un patio central interior de planta rectangular.
„Vale
realmente la pena visitar el castillo Greinburg. Hay muchas cosas interesantes
para
descubrir. ¡Ya lo he visitado
dos veces,
es un castillo fantástico!”
(Georg & Andrea)